Not known Details About mantener el amor vivo
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La resolución de este punto está muy ligada al primero; es decir, necesitamos trabajarnos y cuidarnos a nosotros mismos para no caer en la “necesidad”
¿Quién no conoce a dos personas que tras caerse mal en un principio llegaron a crear un buen matrimonio, o a una pareja profundamente enamorada que acabó en un divorcio turbulento?
Sabemos que no nos vale cualquiera, y que en este arte del querer hay que tener cabeza para no nutrirnos solo de decepciones. Todos ansiamos de algún modo un amor verdadero. Saber qué lo determine es sin duda un primer paso.
Por curioso que resulte, los terapeutas de pareja se encuentran muy a menudo con este mismo dilema: el tener que explicar a sus pacientes qué es eso a lo que llamamos “amor verdadero”. Cabe decir también que cada vez que iniciamos una relación nos decimos a nosotros mismos que lo hemos encontrado.
«El Beso» de Auguste Rodin: Esta escultura representa a dos amantes en un abrazo íntimo. Rodin captura un momento de pasión y ternura, destacando la fuerza y la belleza del amor físico y emocional.
Quizá se podría sintetizar lo dicho estableciendo que los que han aprendido a amar no dependen de la persona amada, pero tampoco permiten que ella dependa de ellos, porque saben que de cualquiera de los dos lados de la cadena, el esclavo y el amo son víctimas de la esclavitud y la rechazan de plano.
De estos 3 conceptos derivan diferentes tipos de website amor según los elementos presentes en la fileórmula del amor:
En términos de manifestaciones prácticas, el amor verdadero puede verse en el respeto constante, la comunicación honesta y abierta, la disposición a perdonar, y la capacidad de poner las necesidades de la pareja a la par o por encima de las propias cuando sea necesario. Se muestra en la consistencia del afecto y el apoyo, sin importar las circunstancias externas.
La relación entre Elizabeth Bennet y el Sr. Darcy evoluciona de malentendidos y prejuicios a un amor profundo basado en el reconocimiento y la apreciación de las virtudes y defectos del otro.
Por eso preferir en vez de necesitar tiene como consecuencia directa otorgarle más valor a la persona que queremos, pues la valoraremos por quién es y no por lo que nos aporta.
Los miedos hacia el futuro y hacia lo que pueda ocurrir con esa relación presente tampoco importa. Porque no hay temores, solo la convicción de que aquello que se quiere, se cuida y se disfruta aquí y ahora.
El amor verdadero es más que un sentimiento y la pasión orquestada por una serie de neurotransmisores. Al inicio cuenta con unos elementos particulares:
¿Cómo se manifiesta este amor en nuestras relaciones diarias? La siguiente sección proporciona ejemplos prácticos y cotidianos que ilustran cómo reconocer y valorar el amor verdadero en nuestras propias experiencias.
Desde pequeños vamos integrando e interiorizando estos patrones y llegamos a la edad adulta con un concepto erróneo del amor.
Girona argumenta que el amor verdadero "implica buscar la satisfacción del otro, estableciendo así una premisa esencial de reciprocidad y compromiso mutuo".